Los números

Me siento a escribir sin inspiración, soy un páramo. No sé qué me pasa, este tema no me inspira, y eso que nuestra vida está plagada de números en todos los conceptos y en todas las facetas de la vida. Y, también será porque soy de letras y los números nunca se me dieron bien.

Nada más nacer ya hay un número que te marca, compuesto por tu fecha de nacimiento, día, mes y año, en mi caso 12 del 6 de un año que dejo en la incógnita. Según vas creciendo te van catalogando por tu edad: tiene 21 días o, acaba de cumplir 3 añitos, con tus 18 años ya puedes votar. No sé qué le pasa a mi marido, últimamente está insoportable, debe ser la crisis de los 40. Qué suerte, ya te jubilas y, te ves espléndida con tus 65 años. El abuelo está perdiendo la cabeza, a sus 80 años empieza a manifestarse su demencia senil.

Siempre vivimos marcados por los números: mi hijo está en 2º de carrera, necesitas al menos 3 años de experiencia para ejercer, nuestros amigos acaban de celebrar su 25 aniversario.

Y residimos en municipios que tienen asignado un número de distrito postal, en una calle o plaza determinada con un número que permite localizarnos mejor, estamos totalmente catalogados y controlados. También estamos supeditados a un número de teléfono que nos comunica con los demás, a veces a más de uno, pues ya es rara la persona que no tiene un teléfono móvil o, incluso dos.

En el médico, ya casi todas las consultas van por número y, en el mercado tenemos que coger número para poder comprar en la carnicería, pescadería o en cualquier otro puesto en el que estén esperando más de una persona. Deme 1 pescadilla fresquita y, luego tengo que comprar 4 filetes que hoy se quedan mis 2 hijos a comer.

El Estado nos ordena también en números y por números…. Muchos miles de personas ocupadas, otros tantos miles de personas en paro y, otros tantos ó cuantos pensionistas. Y, no nos paran de repetir que tiene que haber un equilibrio entre las personas que cotizan y entre las que perciben pensiones o ayudas por su situación particular pues, sí la operación sale en negativo no es viable. El conjunto siempre tiene que ser factible para que sea efectiva la ecuanimidad en la distribución de las riquezas.

Y, fulanito gana tanto y zutanito gana cuánto. Hacienda haciendo sus números, valga la redundancia, para colocarte en un baremo que te identifique y te asigne lo que tienes que ganar y pagar. Siempre los números presentes en nuestras vidas, en nuestra economía, siempre presentes para todo. Y el Dow Jones, el Ibex 35, el Índice Nikkei, etc, etc, etc.

Nuestro coche está que no puede más, tiene más de 15 años y muchos kilómetros, sobrepasa los 300.000. Creo que el pobre ya ha cumplido, tendremos que hacer números para ver sí nos podemos comprar un coche nuevo.

¡¡¡Dios!!!… 350.000 euros por ese chalet, no llegamos ni por asomo, tendremos que conformarnos con un pequeño apartamento de, al menos, 2 habitaciones y 1 baño.

¿¿¿Cuánto??? Eso vale la matrícula el próximo año, ya tienes 20 años y, como no apruebes, tendrás que ponerte a trabajar…

Llevamos saliendo más de 2 años y resulta que Marisa se ha quedado embarazada, está de 4 meses. El niño está previsto que nazca sobre el 20 de julio, más o menos.

He ganado 100 euros en la lotería. Mi número, el 24.316, ha salido premiado en la pedrea.

Están recaudando dinero para ayudar a una persona que necesita un tratamiento médico muy caro, llevan ya recogidos 3.452 euros sí sumamos todas las aportaciones.

Ya ha salido la temporada 5 de mi serie favorita, tiene 18 capítulos y un epílogo final, estoy deseando verla.

Y así podríamos estar citando y citando números hasta el infinito, empachados de números, sobre todo cuando hablamos en conceptos astronómicos o matemáticos.

Por eso, aunque no sean atractivos para mí, ahí están siempre presentes en nuestras vidas por eso merecen una mención especial, discretos pero impasibles, controlando toda nuestra actividad y nuestra propia existencia.

Somos seres humanos matemáticamente catalogados, es lo que hace nuestra sociedad más racional, no concibo una sociedad civilizada sin estas determinaciones y criterios, quizá en una isla desierta fuera otra cosa …

Me gustaría no ser un número, pero es lo que hay, hasta en el cementerio nos asignan un número para localizar nuestros restos.

Tendremos que llevarlo bien, no queda otra. Nuestra humanidad está regida por los números, ellos son los que mandan, aprendamos esta lección y, aprendamos a no sobrepasar sus límites pues nos quedaríamos sin identidad. ¿¿¿Quizá los extraterrestres pudieran enseñarnos algo???… ya que, en este mundo en el que vivimos y conocemos, no se concibe otra manera de existir.

24 enero, 2017
Ana María Pantoja Blanco

4 comentarios en «Los números»

  1. …esto cuando lo escribiste, después de UN gin-tónic, DOS cervezas, UN vermut, … bonita elucubración te ha salido, buena para compartirla y comentarla UNA noche detrás de UN PAR de copas…😜

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